Después del éxito de las primeras Jornadas de Investigación Agraria para el Desarrollo organizadas algunos años atrás, las segundas han tenido lugar en la Universidad Politécnica de Madrid entre el 22 y el 23 de marzo 2017, con el objetivo de reunir a los actores principales del sector, como pueden ser las ONG, universidades, agencias de cooperación, centros de investigación, etc, para debatir sobre la problemática de la falta de financiación pública en el sector además de la dificultad para los investigadores en desarrollo agrícola para poder conseguir reconocimiento académico por su trabajo.
Los principales asistentes a la conferencia fueron la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), EuropeAid, el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA), y la Universidad Politécnica de Madrid. De todas formas, la conferencia estaba abierta al público, por lo que muchos estudiantes de máster y doctorado nacionales fueron a presentar su investigación o simplemente a asistir a las charlas y presentaciones. Representantes de las ya mencionadas instituciones presentaron los principales problemas que el ramo va a tener que afrontar en el medio-largo plazo y se pusieron de acuerdo en enfatizar la necesidad de encontrar nuevas maneras de conseguir fondos, posiblemente del sector privado.
El tremendo problema que los investigadores en desarrollo agrícola españoles se encuentran es que su trabajo no está reconocido como trabajo académico. Así por ejemplo, cuando solicitan una plaza como profesor en una universidad pública, la investigación para el desarrollo no se tiene en cuenta para poder acceder a esa plaza. Este problema se exacerba cuando se empareja con la agricultura, ya que esta ha sido una de las áreas más desatendidas históricamente en España. Entre los presentes se habló sobre las posibles soluciones, entre las cuáles sobresalieron las de demandar a los rectores y los comités evaluadores de las universidades el tomar en consideración a la investigación para el desarrollo y los proyectos de desarrollo dentro de los criterios evaluables para plazas de profesor. La otra sugerencia que surgió del debate fue la incorporación de la agricultura como una asignatura obligatoria dentro del currículo de la enseñanza obligatoria.
Asistiendo como representante nacional de YPARD España pude conocer a representantes de otras organizaciones con las que YPARD comparte valores y objetivos. Esto fue una oportunidad óptima para que YPARD España se diese a conocer en el ámbito nacional, y así poder crear lazos con estas organizaciones. Una de ellas fue “Agrónomos sin Fronteras”, una ONG que lleva a estudiantes de Ingeniería agrícola al campo para hacer sus trabajos fin de grado o fin de máster con el asesoramiento técnico de profesores especialistas. Trabajan principalmente en la región de Iringa, una aislada región de Tanzania, pero están intentando abrir nuevos destinos en Mozambique. Sus tres principales áreas de trabajo son proporcionar capacitación agraria (más de 5000 granjeros hasta ahora), desarrollar servicios de extensión agraria y promover el asociacionismo entre los granjeros.
Para acabar quiero mencionar la gran aportación de ideas que ha habido sobre el futuro de YPARD en España y las posibles acciones a llevar a cabo. Como ejemplo, se aconsejó que YPARD debería estar presente en más conferencias nacionales donde crear nuevas redes de contacto, ya que es todavía una organización bastante desconocida. Siendo el objetivo principal de YPARD la promoción de la agricultura entre los jóvenes, la organización puede convertirse en un actor principal para mejorar la mala imagen que esta tiene en la era de la tecnología. Esto ha sido también una de las conclusiones de la conferencia, y así se demuestra el alto potencial que tiene YPARD para crecer y conectar generaciones.
Créditos de imágenes:Victor Suarez Villanueva